¿Sabías que el peor pirata de la historia era español? Pues así es, se trata de Benito Soto Aboal, más conocido como el último pirata del Atlántico o el español errante capitán del buque “La Burla Negra”.
A pesar de que a modo popular son mucho mas conocidos otros piratas como Edward Teach (Barba Negra) o William Kidd, pues tuvieron una trayectoria más extensa y dieron el aspecto al que hoy en día reconocemos como pirata, no fue otro que el español errante el más curiel y sanguinario de todos.
Benito Soto Aboal, nació en Pontevedra en el año 1805, sus inicios a bordo de buques fueron como marinero en las costas gallegas. Al cumplir los 17 años Benito Soto se enroló en el buque de nacionalidad brasileña de dicado a la venta de esclavos, llamado “El Defensor de Pedro”. No tardó más de un año en amotinarse contra su capitán Pedro Mariz de Sausa Sarmento, para hacerse con el control del navío, para más tarde ordenar encerrar y asesinar a su mayor cómplice en la toma de posesión para hacerse con el control total del barco.
Fue entonces cuando el español errante fue sembrando el terror por todo el Atlántico a borde de “El Defensor de Pedro” barco que rebautizaría como “La Burla Negra” saqueando indiscriminadamente a todos los barcos que surcaran las aguas atlánticas y asesinando a sus tripulaciones sin piedad.
Su primera revuelta como pirata fue a la fragata británica “Morning Star” a la cual saqueó y extermino a la totalidad de su tripulación, para luego dirigirse a las Azores y seguir con sus ataques. Entre otras embarcaciones saqueadas por Benito Soto Aboal figuran el Bergantín americano “El Topacio”, La fragata “Sunbury” que hundió en las costas canarias, el portugués “Cessnock” o el británico “New Prospect”
Tras haber cosechado un gran botín el español errante decidió poner rumbo a La Coruña, donde asesinó a 3 de sus hombres que no contaban con su confianza, a modo de aviso a posibles desertores, y vendió todo el botín de sus saqueos, haciéndose pasar por el capitán de “El Defensor de Pedro” para posteriormente seguir su travesía hacia el Golfo de Cádiz, donde planeaba deshacerse del barco para poder retirarse con el resultado de la venta de todo el botín. Finalmente tras confundir el faro de la isla de León (en el municipio de San Fernando) con el faro de tarifa, La Burla Negra quedo encallada en la costa y fueron descubiertos por las autoridades.
Tras ser juzgados como piratas, todos los miembros de la tripulación fueron condenados a la horca, todos excepto uno, Benito Soto Aboal que consiguió escapar en medio de la reyerta a Gibraltar, donde fue apresado por los ingleses y condenado a morir ahorcado. Así fue como el 25 de Enero de 1830 a los 24 años de edad moría “El ultimo gran Pirata del Atlántico”, dejando tras de si, una leyenda que aun perdura.